La Base de Maquillaje I
Estaba hoy en Sephora cotilleando cositas y de pronto a mi espalda, llega una chica y le pide a la dependienta una base. A lo que la dependienta le contesta, ¿De qué tipo? y la clienta contesta "No sé, me da igual". Este es el motivo por el cual escribo esta entrada.
No voy a poder resumir en una sola entrada todo lo que hay que tener en cuenta a la hora de elegir una base adecuada, pero sí dejaré unos consejos y unas reflexiones.
Lo primero en lo que yo me fijaría es en el tipo de maquillaje con el que mejor te sientas. Es decir, si quieres textura en polvo suelto, el polvo compacto, fluida, en crema, etc.
A partir de ahí ya has descartado muchísimos productos y te puedes centrar.
Lo siguiente que yo te preguntaría si fuese la dependienta es si es para una ocasión especial, si es para salir por la noche, si es para una boda, si es para el día a día, etc.
Después vendría el tipo de piel. Es importantísimo que la base de maquillaje no reseque la piel ni la engrase, sino que esté en su punto justo.
A continuación el color. Esto es lo más difícil ya que depende de la iluminación, de la época del año, de la moda, de cómo tengas tú la piel..., vamos de mil cosas.
Y por último el precio. A estas alturas ya queda poco donde elegir pero siempre hay un amplio abanico de precios a la hora de elegir la base.
Sin embargo, y a pesar de todo esto, el mejor consejo que os puedo dar es que no os cortéis y pidáis mil muestras de todos los tipos que os puedan interesar (obviamente, en polvo y tal es difícil); en Sephora, por ejemplo te hacen ellas las muestras con los probadores que tienen en los stands. Y es lo mejor, te lo llevas a casa, te lo pones un día por la mañana y vas viendo el resultado a lo largo del día. Este es un consejo genial si piensas invertir en una buena base de maquillaje de Chanel o de Dior.
Pues a esta publicación seguirán muchas otras para que lleguemos a la base ideal.
No voy a poder resumir en una sola entrada todo lo que hay que tener en cuenta a la hora de elegir una base adecuada, pero sí dejaré unos consejos y unas reflexiones.
Lo primero en lo que yo me fijaría es en el tipo de maquillaje con el que mejor te sientas. Es decir, si quieres textura en polvo suelto, el polvo compacto, fluida, en crema, etc.
A partir de ahí ya has descartado muchísimos productos y te puedes centrar.
Lo siguiente que yo te preguntaría si fuese la dependienta es si es para una ocasión especial, si es para salir por la noche, si es para una boda, si es para el día a día, etc.
Después vendría el tipo de piel. Es importantísimo que la base de maquillaje no reseque la piel ni la engrase, sino que esté en su punto justo.
A continuación el color. Esto es lo más difícil ya que depende de la iluminación, de la época del año, de la moda, de cómo tengas tú la piel..., vamos de mil cosas.
Y por último el precio. A estas alturas ya queda poco donde elegir pero siempre hay un amplio abanico de precios a la hora de elegir la base.
Sin embargo, y a pesar de todo esto, el mejor consejo que os puedo dar es que no os cortéis y pidáis mil muestras de todos los tipos que os puedan interesar (obviamente, en polvo y tal es difícil); en Sephora, por ejemplo te hacen ellas las muestras con los probadores que tienen en los stands. Y es lo mejor, te lo llevas a casa, te lo pones un día por la mañana y vas viendo el resultado a lo largo del día. Este es un consejo genial si piensas invertir en una buena base de maquillaje de Chanel o de Dior.
Pues a esta publicación seguirán muchas otras para que lleguemos a la base ideal.
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